Introducción
sería la última. La vida de Zavala nos lleva, así, por los
dor ­frecuentemente ubicado en el área de la adminis-
caminos de la Monarquía más poderosa y a la vez más
tración militar­, aunque en la batalla de Lepanto y por
confianza personal de su señor Luis de Requesens, le
combatida de su tiempo, cuando el sol que brilla en la
correspondiera asumir la responsabilidad de la galera
jornada de Lepanto empieza a ensombrecerse con la nie-
«Granada», mostrando el aventajado valor que fue de-
bla de los Países Bajos, y la lucha en múltiples frentes
bidamente acreditado por Juan de Austria. No era Do-
acaba por sumergir a las finanzas en un callejón sin sali-
mingo un hombre que se arrugase, y tenemos de ello
da.
múltiples ejemplos en otros episodios de su vida que
Era, en fin, demasiado tentadora la propuesta que se me
nos muestran su fortísima personalidad, entereza, rigu-
hacía de entrar en la biografía de Domingo de Zavala,
rosidad en el cumplimiento del deber, y hasta aspereza,
teniendo la gran fortuna de ir con él, de su mano, a
que ­dicho sea de paso­ se aprecian hasta en las entre-
través de algunos de los momentos y lugares más tras-
vistas y correspondencia que mantuvo con el propio Rey
cendentales y palpitantes de la Europa de la época, y no
Felipe II en 1575.
sólo por lo que hace a Lepanto y Flandes, sino también
Es de justicia agradecer a Luis de Zavala la iniciativa de
por los entresijos de la Corte de los Austrias en Madrid,
esta investigación, que nos ha permitido rescatar de las
tanto en época de Felipe II como de Felipe III. Pisando
sombras la figura de Domingo de Zavala, testigo y co-
la cubierta de una galera en «la más alta ocasión que
partícipe de acontecimientos de primera magnitud en
vieron los siglos», los salones del palacio de Coudenberg
la época de mayor presencia internacional de España, y
en Bruselas, o los del Alcázar Real de Madrid, y viéndo-
punto de arranque, asimismo, de un linaje provincial
le actuar junto a Luis de Requesens, Juan de Austria,
de muy larga proyección posterior en la Guipúzcoa de
Felipe II, Juan de Zúñiga, el Cardenal de Granvela, o el
siglos venideros.
Duque de Lerma.
Conviene aclarar que la existencia de Domingo de Za-
vala no fue propiamente la de un marino (como a veces
erróneamente se ha supuesto), sino la de un administra-
Guía de siglas
ACZ: Archivo de la Casa de Zavala (San Sebastián).
AGG: Archivo General de Guipúzcoa (Tolosa).
AGS: Archivo General de Simancas.
AHDSS: Archivo Histórico Diocesano de San Sebastián.
AHN: Archivo Histórico Nacional (Madrid).
BZ / FA: Biblioteca Zabálburu, Fondo Altamira (Madrid).
CB / AP: Centre Borja, Arxiu del Palau (Sant Cugat del Vallès).
Co.Do.In.: Colección de documentos inéditos para la historia de España
IVDJ: Instituto Valencia de Don Juan (Madrid).
Ju.Di.Gi.: Juntas y Diputaciones de Gipuzkoa. Documentos.
Nu.Co.Do.In.: Nueva colección de documentos inéditos para la historia de España y de sus Indias.
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