2.1. Los Países Bajos y su conflicto
De Amberes a Madrid
Enviado por el gobernador Requesens a la Corte,
para tratar con el rey Felipe II
la crítica situación de Flandes (1575-1576)
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Italia, decantada a favor de la primera gracias a victorias
como la tan célebre de Pavía (1525). En la época de
Felipe II que ahora nos ocupa, el dominio español de
Milán se había consolidado y la región vivía en paz; no
obstante, una paz armada y vigilante, ya que era perma-
nente el temor de un ataque francés, que afortunada-
2.1.  Los Países Bajos y su conflicto,
mente no llegaría a concretarse. Era cierto que Francia
soportaba sólo de muy mala gana la preponderancia es-
durante el mandato
pañola en Italia, y que con tal de socavar el poderío de
de Luis de Requesens
los Austrias españoles no tenía inconveniente incluso
en hacer tratos con los infieles (el Imperio turco), pero
El otro momento de máxima intensidad en la vida de
los graves problemas internos que por entonces atrave-
Domingo de Zavala, junto a la jornada de Lepanto, fue
saba, la incapacitaron finalmente para llevar a cabo su
su estancia en Flandes ­coincidiendo con una de las eta-
deseada intervención militar en Italia. En cualquier caso,
pas de mayor gravedad en la guerra que allí se mantenía
los rumores y la inquietud al respecto fueron constan-
con los rebeldes (1573-1575)­, y muy en especial, la
tes, y el propio Requesens llegó a Milán con la idea de
comisión que se le encomendó desempeñar ante el pro-
un posible ataque francés inminente1 el cual no llegaría
pio Monarca en Madrid, con el objetivo de recabar so-
a producirse.
corros urgentes para el ejército que allí luchaba por sos-
Estos temores eran consecuencia de la evidente contra-
tener la precaria soberanía de Felipe II (1575-1576).
riedad que para todos los planes franceses había supues-
Lo anterior, sin menosprecio por supuesto de otras eta-
to la gran victoria hispana en Lepanto, y del probable
pas de la existencia de nuestro personaje que son tam-
deseo francés de aprovechar la dispersión en que se ha-
bién de gran importancia e interés. Singularmente, su
llaban en ese momento los esfuerzos y los recursos espa-
presencia en la cúspide de la Hacienda de la Monarquía
ñoles, mayoritariamente volcados contra los turcos o con-
como Contador Mayor (1594-1603) y miembro del
tra los rebeldes holandeses.
Consejo supremo de Hacienda (1600-1603). Aunque
La importancia estratégica del Milanesado para la Mo-
ciertamente estas últimas no presentan el plus de dra-
narquía hispánica era, a todas luces, de primer orden.
matismo de los acontecimientos de Lepanto y Flandes.
Baste considerar su posición geográfica: al oeste tenía el
Ducado de Saboya (aliado de España) pero, más allá, se
encontraba ya Francia; al este, Venecia, que veía igual-
mente con malos ojos la preponderancia española en
En el Milanesado
Italia; al sur, Génova, excelente socia de España; y al
norte, la neutral Suiza, camino de gran potencialidad
Hagamos antes una breve referencia a su paso por Mi-
hacia Centroeuropa.
lán (1572-1573), siguiendo una vez más ­ya lo hemos
apuntado­ a su señor el Comendador Mayor de Casti-
De ahí que se considerase a Milán el «muro» o «escudo»
lla Luis de Requesens, nombrado nuevo Gobernador
que defendía de Francia a las demás posesiones españo-
las en Italia (Nápoles y Sicilia), y el «aparejo»2 que per-
general y Capitán General del Milanesado. Sabemos que
Zavala fue secretario de Requesens en Milán (como lo
mitía al poder hispano desplegar su actuación en el Norte
era ya con anterioridad a Lepanto, desde 1568), aunque
de Italia, y más allá ­hacia Flandes, en principio, pero
no sabemos en qué condición, si continuando como se-
también, en el hipotético caso de que fuera necesario,
cretario particular, o bien ocupando alguna de las Se-
hacia Francia, Venecia, o el Imperio­.
cretarías del Gobierno y Capitanía general.
De todo lo anterior, hay que destacar dos aspectos que
El Milanesado había sido, unas décadas atrás, teatro de
constituían la misiones prioritarias de Milán como pie-
la lucha entre España y Francia por la hegemonía de
za del tablero español.
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