3.4. Contador Mayor de Hacienda y Consejero de Hacienda
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Consecuencia de todo ello, en fin, fueron la sólida y palpable «lealtad monárquica» de
las tierras vascas, y su ferviente españolismo ­de sustancia monárquica y católica­, com-
patible por supuesto con el patriotismo local.
Vayamos, por fin, al caso concreto de Domingo de Zavala como integrante del grupo de
influencia del que se valía la Provincia de Guipúzcoa para apoyar sus intereses en la
Corte. La colección documental Juntas y Diputaciones de Gipuzkoa recopilada por Ayer-
be (1990-)3 nos ofrece pistas muy significativas a este respecto, que simplemente apun-
taremos sin entrar en el detalle de cada caso. Fíjese el lector en lo revelador de los
siguientes indicios:
- Recién nombrado Domingo de Zavala para el empleo de Contador Mayor de Hacien-
da (recordemos, el 28-9-1594), las Juntas Generales reunidas en noviembre de 1594
en Motrico se preocupaban de felicitarle por su designación. Lo mismo hacían con
Domingo de Ocáriz ­natural de Mondragón­, nombrado Fiscal de la Contaduría
Mayor de Cuentas (a no confundir, recordemos, con la Contaduría Mayor de Hacien-
da).
- 9-3-1595, Azcoitia: la Diputación de Guipúzcoa acusa recibo de una carta del licen-
ciado Alzaga ­que desempeñaba cierto encargo de la Provincia en Madrid­ alabando
el trabajo del «agente en Corte» Antonio de Olazábal y agradeciendo la colaboración
del Contador Mayor Domingo de Zavala, que «se mostró muy apasionado e interesa-
do en este negocio». Alzaga señalaba, muy gráficamente, «que si el señor Contador
Zavala se hallase en Consejo tenía esta Provincia las espaldas seguras».
- Juntas Generales de abril de 1595 (Tolosa): se acusa recibo de otra carta del licenciado
Alzaga desde Madrid, señalando que no dio las cartas de la Provincia a los Contadores
Mayores «excepto a Domingo de Zavala (...), porque quizás levantaría la Provincia la
liebre (...), y mientras callan lo mejor es callar y dejarlos».
- En esos primeros meses de 1595 la Provincia escribió cartas simultáneamente a las
siguientes personas: Juan, Martín, y Francisco de Idiáquez; Juan de Ibarra; Domingo
de Zavala; Cristóbal de Ipeñarrieta; y Domingo de Ocáriz (enero); a las mismas perso-
nas, añadiendo a Juan de Menchaca en lugar de Cristóbal de Ipeñarrieta, en febrero; y
a una lista similar, de nuevo en abril.
Recordemos que Ipeñarrieta (natural de Villarreal de Urrechu) era uno de los dos
Secretarios del Consejo de Hacienda; Menchaca, Contador Mayor de Hacienda; y
Ocáriz, Fiscal de la Contaduría Mayor de Cuentas. Añadamos los siguientes datos:
Martín y Francisco de Idiáquez eran, respectivamente, sobrino y primo de Juan de
Idiáquez, y por influencia de éste, ejercían las Secretarías de Estado para los asuntos del
Norte de Europa, el primero, y de Italia, el segundo (ambos, en el período 1587-1600);
en cuanto a Juan de Idiáquez ­que no necesita más presentación­, recordemos que
aunque nacido en Madrid seguía estrechamente unido a sus parientes y paisanos gui-
puzcoanos. Juan de Ibarra era Secretario del Consejo de Indias (1586-1604), y miem-
bro asimismo, al igual que aquellos, de diversas Juntas que de forma paralela se consti-
tuían «ad hoc» para problemas concretos.
- 24-1-1596, San Sebastán: la Diputación Foral acusa recibo de la carta de su agente en
Corte Antonio de Olazábal sobre un asunto, en la que «hace relación de (...) el favor y
ayuda que en esta parte le ha dado y da el Contador Domingo de Zavala».
- 13-3-1596, idem: Olazábal comunica que Zavala «le hizo grandes ofrecimientos de
que desea emplearse en servicio de esta Provincia en cosas mayores, como lo hará en
todo lo que él pudiere y valiere».
- En las Juntas Generales de noviembre de 1596 (Hernani) se acuerda dar las gracias a
Domingo de Zavala atendiendo a lo que a este respecto escribía Martín de Mocorona
desde Madrid: «Domingo de Zavala, Contador Mayor de Cuentas [nota: en realidad
era Contador Mayor de Hacienda, empleo de mayor categoría], (ha) ayudado a esta
Provincia para la brevedad de la vista de este pleito con mucha voluntad, a quien pide
se mande dar las gracias pidiéndole que haga lo mismo (en) adelante». (Ju.Di.Gi., T.
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XIII, pp. 188-189).
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